El diputado federal del PAN, Paulo Martínez, denunció las condiciones en las que se llevó a cabo la sesión de la Cámara de Diputados para la discusión de la Reforma al Poder Judicial de la Federación. Pues debido al bloqueo del acceso a la Cámara por parte de miembros opositores a la reforma, la sede de la sesión fue trasladada a un gimnasio que, según comentó el diputado, no contaba con las medidas ambientales ni el mobiliario necesario para una sesión como aquella que duró 18 horas; afirmando que esta situación fue planeada para «debilitar» a la oposición, a pesar de que la oposición aritméticamente no cuenta con la mayoría calificada en dicho órgano.

“Nos quisieron doblar, nos quisieron poner en las peores condiciones […] Nos llevaron a una sede alterna con sillas de tipo fiesta para cansarnos en una sesión de 18 horas, con un calor inmenso. La Cámara tiene las condiciones necesarias para sesionar de forma adecuada, pero nos llevaron a un espacio extremadamente difícil, pensando que nos íbamos a rendir, pero nos mantuvimos firmes”, expresó el legislador.

A pesar de las dificultades y la aprobación en lo general de la Reforma, el diputado Martínez aseguró que el mensaje de la oposición fue claro, mostrando su resistencia y firmeza durante los trabajos de la sesión. Ahora, esperan que los 43 miembros del Senado que pertenecen a la oposición voten en contra de la Reforma Judicial en la sesión plenaria del miércoles 11 de septiembre con la finalidad de frenar su avance que, según afirman, pone en riesgo a la democracia en el país.