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Abel fue internado en un anexo y su historia cambió radicalmente, ahora se debate entre la vida y la muerte en un hospital de la ciudad, pues de acuerdo a reportes médicos, en el lugar contrajo una extraña enfermedad que le ha consumido el 50 por ciento de su piel.

Así, como se muestra en la primera fotografía, fue como Abel ingresó al anexo denominado «Guerreros Margaritas» y el cual opera en la colonia Ojo de Agua, ubicado en el municipio de Jesús María, Aguascalientes; de acuerdo a sus familiares, esta fotografía fue tomada por el mismo personal del centro de rehabilitación:

«El no me comenta que lo hayan golpeado, el llegó bien e incluso caminando al anexo […] Lo que no me agrada nada es que las personas estuvieran orinando ahí en el cuarto donde estaba él»

Miguel, hermano de Abel

De esta manera, la familia de Abel señaló que los responsables del anexo nunca les dieron aviso sobre las condiciones del hombre que hoy se encuentra en una grave condición de salud; no se les informó nada sobre la enfermedad que Abel estaba desarrollando al interior del Centro de Rehabilitación. No fue hasta que su hija lo llevó para realizarle unos estudios que descubrieron la infección que comenzaba a devorar su piel, principalmente en la zona abdominal.

Después de ser regresado al anexo, su familia le consiguió el medicamento, el cual fue administrado por los empleados del lugar bajo la promesa de que ahí mejorarían su condición. Asimismo, el médico encargado aseguraba que ningún otro hospital lo aceptaría.

«Tomé la decisión de llevarle el medicamento al doctor y darle la confianza para que lo levantara, pero luego me hablaron porque ya no querían que nadie de ahí lo limpiara sino que lo limpiara alguno de sus familiares; entonces acudí yo a limpiarlo y en una de las heridas ya traía gusanos»

Afirmó con indignación el hermano de Abel, quien menciona que fue en ese momento que se percató del bote donde la gente orinaba en la esquina del cuarto de su hermano y las condiciones insalubres en las que operaba el Centro de Rehabilitación.

Tras esto, el hermano de Abel decidió trasladarlo al Hospital General Tercer Milenio, sin embargo, en el nosocomio no contaban con área de aislamiento, por lo que fue indispensable nuevamente trasladarlo, ahora, a Calvillo.

Finalmente, y después de de varias valoraciones médicas es en la Clínica 3 del IMSS en Aguascalientes donde actualmente Abel se encuentra en un estado de salud extremadamente delicado, enfrentándose a la posible necesidad de ser intubado. Todo esto, producto de la presunta negligencia y las condiciones insalubres de un anexo que prometía su «rescate» y reinserción en la sociedad.