La venta de vapeadores sigue presente en Aguascalientes, donde diversos negocios y locales los incluyen entre su mercancía, incluso recurriendo a ventas clandestinas. A esta problemática se le suma la reciente aprobación en la Cámara de Diputados de una reforma constitucional que prohíbe los vapeadores y cigarrillos electrónicos, así como el uso ilícito de fentanilo y otras drogas sintéticas. Este contexto podría endurecer los operativos para el aseguramiento de estos productos.
“Los meten camuflajeados; gente que tiene permiso de vender artículos varios, por ejemplo, quienes venden chácharas, y los filtran por ahí”, destacó el director de Mercados, Estacionamientos y Áreas Comerciales, Israel Díaz García.
El director señaló que, si se detecta la venta de productos no autorizados conforme al permiso de un local o negocio, se aplicarán sanciones que incluyen el retiro de la mercancía, multas de entre 1 y 40 UMAs, y el posible cierre total del establecimiento infractor, en función de agravantes.
Uno de los principales desafíos asociados al uso y venta de vapeadores, además de los riesgos para la salud, radica en su diseño, que a menudo dificulta su identificación. Por ello, el Instituto de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA) colabora con la Dirección de Mercados para reforzar los operativos de aseguramiento.
“Debemos tener experiencia en cuáles son exactamente, porque a veces traen formas que no los hacen parecer vapeadores”, explicó Díaz García.
Finalmente, el director indicó que este año se han realizado únicamente dos aseguramientos, en los que se incautaron aproximadamente 30 vapeadores. Este tipo de operativos podría intensificarse con la implementación de la nueva prohibición, que, en caso de homologarse en el Congreso Estatal, daría lugar a sanciones más estrictas.